La escena inicial establece el tono de lo que será Brassic. Un treintañero con aspecto un poco extraño está sentado sobre un puente no demasiado alto con las piernas colgando hacia el vacío. Un vecino que lo conoce pasa por allí y le pregunta con tono casual si está pensando en suicidarse. Antes de que pueda responder, le advierte que el puente es demasiado bajo y le aconseja que pruebe con una torre o un tren en movimiento. Si a eso le sumamos el acento del norte británico que tienen los personajes, Brassic es pura comedia negra británica.
Fuck the middle class. Fuck The Guardian. Fuck three holidays a year, and drinking red wine, talking bollocks at dinner parties. Fuck quinoa and keenwa. Fuck scented candles. You can fuck your people carriers and your posh kids called Tilly and Tarquin. Fuck moisturiser, fuck vitamins. Fuck lacrosse, and bloody tennis and 18 holes on a fucking Sunday.
They call us Blair’s forgotten youth. Kids that grow up in a town that offered nothing. No opportunities, no prospects, no hope. But what they’ll never understand is this, we’re not victims. We just have a different way of living. It’s about having your mates, man. Having a laugh, and just finding a way to survive.
Brassic, episodio 1
La serie sigue las desventuras Vinnie -el treintañero del puente- que vive en un vagón semiderruido en el bosque y su banda de amigos. El grupo se compone por Cardy, que tiene obsesión por la comida y los animales; Ash, gitano y boxeador aficionado; Tommo, cuyo trabajo consiste en regentear una mazmorra sadomasoquista; Dylan, jugador de póker y bastante irresponsable; y la pareja de Dylan, Erin, madre soltera y estudiante universitaria.
La escena inicial cobra más sentido cuando nos enteramos de que Vinnie padece de trastorno bipolar, además de que proviene de un hogar con serios problemas. El sector masculino del grupo de amigos usualmente está enredado en actividades ilegales. La serie tiene algunos momentos dramáticos y muchas situaciones divertidas, que se combinan a la perfección.
Las situaciones que podemos mencionar tienen que ver con robar un pony, escapar de la policía, participar de una pelea de box amateur, cultivar marihuana y robar dinero para hacerse cargo de las exequias de una persona recientemente fallecida. Y eso es sólo el comienzo.
La serie es muy divertida, pero tal vez el mayor logro es algo similar a lo que sucede con This Way Up: las escenas dramática son profundas, conectadas con la historia y la personalidad de los personajes, y se integran a la perfección en el relato general. No podemos recomendarla lo suficiente y ya la consideramos uno de los mejores estrenos del año.
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Mi reino por una serie 